Los gustos del consumidor, la funcionalidad, las relaciones sociales y la situación de la pandemia cambian constantemente las tendencias en decoración e interiorismo de las casas, pero vamos a fijarnos detenidamente en las preferencias en cerámica que vienen marcando fuerte para este próximo año.
Modernidad Revisitada
Este concepto se centra en potenciar la simplicidad de la vida cotidiana. Es decir, alcanzar esa modernidad a través de líneas muy sencillas y simples pero con ciertos toques de estilismos estudiados. Aquí predominan creaciones mínimas y con aire poético, tonalidades claras pero
también gamas de verdes, azules y amarillos evocando la pureza y los tonos orgánicos.
Tradicionalismo Restaurado
Esta tendencia en búsqueda y captura de sobriedad, simplicidad, geometría y patrones tradicionales. (rayas, rombos, motivos étnicos). La gama cromática se centra en tonos claros como grises piedra y beiges, pasando por colores tierra, hasta más fríos como el verde agua o azul grisáceo.
Autonomía artística
Corrientes bohemias, artísticas, electrizantes y con buenas vibras marcarán tendencias tan selectas para este próximo 2021. Acabados rústicos y llamativos de inspiración natural, las piedras, el metal ennegrecido y el vidrio coloreado. La gama cromática de colores van desde el azafrán, terracota o granate, y también tonos silvestres como el verde abeto y el azul turquesa.
El lujo exquisito
Esta corriente se mantiene viva y activa para las próximas inspiraciones en cerámica, vetas pronunciadas, contrastes de color, brillos y mates, superficies veladas y difuminadas para dibujar atmósferas especiales en un interiorismo perfecto.